Semillas de calabaza: las pequeñas semillas son muy saludables
Las semillas de calabaza son saludables porque contienen muchos nutrientes, proteínas y grasas buenas. No debes comer demasiado al principio, porque el cuerpo tiene que acostumbrarse a la gran variedad natural de nutrientes.
¿Por qué las semillas de calabaza son tan saludables?
Las semillas de calabaza, como las semillas de girasol, nueces u otras semillas, son muy saludables. En primer lugar, porque proporcionan al cuerpo bloques de construcción naturales para construir células sanas. Por otro lado, porque contienen tantos nutrientes, proteínas y grasas que incluso pequeñas cantidades cubren las necesidades nutricionales.
- Las semillas de calabaza contienen proteínas de alta calidad, que el cuerpo puede utilizar por completo. Eso significa que puede usarlo para construir nuevas células sanas y corporales.
- Además, muchos minerales están contenidos en los granos. Estos incluyen magnesio, hierro y zinc. Estos son necesarios para las funciones corporales más importantes, como la respiración, el movimiento, el pensamiento y el desarrollo muscular.
- Además, las semillas de calabaza apoyan al cuerpo en la limpieza. Esto elimina los parásitos intestinales, reduce los radicales de estrés, reduce el riesgo de inflamación y apoya al hígado en la desintoxicación.
- Al mismo tiempo, los núcleos causan un aumento en el nivel de serotina. Esto significa que aumenta su buen humor.
- Los ácidos grasos que contiene también proporcionan al cuerpo grasas buenas y saludables, lo cual es tan importante para su estado de ánimo como lo es para el tejido sano.
Coma semillas de calabaza, debe prestar atención a eso
Es importante que coma las semillas de calabaza crudas y sin calentar. Cuando se calientan, los ácidos grasos cambian y dañan el cuerpo en lugar de beneficiarlo. La razón son los enlaces cambiados, que ya no pueden usarse para construir células sanas.
- Coma semillas de calabaza lo más frescas posible, ya que pueden volverse rápidamente rancias debido a la grasa que contienen. Si los granos huelen o saben extraños, será mejor que agarres una nueva porción.
- Incorpore lentamente los granos en su dieta para que su cuerpo y sistema digestivo puedan acostumbrarse lentamente a la mayor ingesta de nutrientes. Si lo tolera bien, aumente la dosis hasta un puñado de granos al día.
- Se puede deducir por el hecho de que el cuerpo no tolera los numerosos núcleos al comienzo de la indigestión, las visitas constantes al baño, las espinillas o el mal humor. El cuerpo trata de deshacerse del exceso.
- Coma conscientemente para que pueda saber cuándo su cuerpo tiene suficiente, no en el medio, no a un lado, y preferiblemente no mezclado con muchos otros alimentos. De lo contrario, perderá contacto con las señales de su cuerpo y comerá más de lo que necesita o algo que no le gusta o no le gusta.
Por cierto, las semillas de calabaza combinan muy bien con la ensalada. Puede encontrar recetas para esto en nuestro artículo Ideas de ensalada: 5 alternativas a la lechuga de hoja.